domingo, julio 15, 2007

La radio en Brasseros

Cada cierto tiempo nos vamos a algún lugar de la ciudad y transmitimos desde allí los programas de Unión Radio Miami. Esta vez la remota fue en el restaurant Brasseros del Doral, mejor conocido como Doralzuela.

A mi particularmente me gusta la idea porque de vez en cuando es bueno relajarse un poco y dejar que la informalidad se apodere del espacio. La gente lo disfruta mucho y hasta se desvían de su camino a casa para acompañarnos un rato en vivo.

Esta vez, en vista de la víspera del cumpleaños de Elí, se me ocurrió invitar a algunas personas sin decirle nada. Lorena se encargó de la torta y bebidas, Betsabé del quesillo y entre la corredera de la transmisión, Elí no se dio cuenta del movimiento que se estaba gestando y que además de oyentes habían amigos en el lugar. De repente Sergio le cerró el micrófono y se lo abrió a Biella Da Costa que salió de su escondite cantando el cumpleaños y Gabriela, la esposa de Elí y sus dos niñas venían con la torta. Nunca me imaginé que se iba a quedar mudo, pero así fue. Después de ese momento, pidió ir a un corte comercial mientras se recuperaba de la sorpresa. Jajajaja. Fue una travesura divertida.

En esta ocasión tuve una asistente de producción: mi hija Victoria que se encargó de coordinar a los invitados sorpresa y tomar las fotos.

Con parte del equipo de la radio: Fred Medina, Alicia De Pedro, Boris Mizrahi y Lorena Mata.







Durante la transmisión con Sergio Gómez y Elí Bravo.








Con Alfonso Corona, el editor de DISTRIKT Magazine que nos hace la cartelera de fin de semana.





La cantante en su escondite.






Lorena escondida con la torta y la familia.

miércoles, julio 11, 2007

A mi que me lleven presa!!!

¡He dicho! Que conciertazo el de The Police. Yo que formo parte de la generación de los mega concierto y las súper estrellas, les puedo decir que éste ha sido uno de los que valen la pena.

Compramos las entradas apenas comenzaron a venderlas y esperamos por meses el día, más con nostalgia que con grandes expectativas. Al menos yo me conformaba con revivir aqueeeellos años en que descubría en Londres las bandas inglesas y coleccionaba los acetatos y LP. Yo tenía un 45 con Roxanne y I Can't Stand Loosing You. Y luego los disfrutaba en las noches de playa caribeña al son de Walking on the Moon o Don't Stand so Close to Me. Quería recordar las noches caraqueñas de Synchronicity. Pues yo esperaba una de esas noches en la que no le paras a que los músicos ya no son los de antes porque los recuerdo y el ambiente lo compensan, especialmente después de las críticas del mismísimo Stewart Copeland sobre su debut. Pensaba que al final, lo rico iba a ser compartir esa salida con mis hijas, Pocho y un grupo de amigos. Pero fue eso y la sorpresa de encontrarme con una banda mejor que la que dejé hace 20 años, con un montaje espectacular con pantallas gigantes y luces alucinantes y Sting... que les puedo decir... igual que el vino. No sólo está espectacular físicamente sino que todavía se puede dar el lujo de cantar Roxanne al final del concierto y llegar a los tonos más altos como si nada.

El Dolphin Stadium estaba lleno. Como el primer día de la temporada de los Marlins en el 2004, después que ganaron la serie mundial o como el año pasado durante el Super Bowl. Estaba hasta la bandera.

Como no llevamos cámara y estábamos bien alto, las fotos las tomamos con los teléfonos en la tarde antes de que comenzara el concierto.

lunes, julio 09, 2007

Mi telefono y yo

¡Que angustia, Dios mío! Hoy me he dado cuenta que estoy obsesionada con mi teléfono. No es que sea adicta a interminables conversas telefónicas. Para nada. Lo que pasa es que se ha convertido en un instrumento básico de trabajo. Más que básico escencial.

Yo tengo dos trabajos, mis hijas y esposo en Miami y el resto de la familia en Venezuela. A veces trabajo en algún rincón de Telemundo que va variando cada cierto tiempo y con él su respectivo número de extensión telefónica. Otras veces trabajo desde mi casa y otras en la radio, donde puedo estar en mi puesto o en el estudio. El problema es que la mayoría de las personas que necesito contactar para alguno de los dos trabajos, no pueden saber en dónde estoy en el momento en que me van a contestar una llamada.

Pero además, con tanto ajetreo de un lado a otro, de vez en cuando dejo algo donde no debo. Sin embargo, que se me quede el almuerzo es reparable, lo peor que puede pasar es que pase un poco de hambre mientras tengo tiempo de para a comprarme algo. Si se me queda el sueter, aguanto algo de frío o le pido a alguien que me auxilie. Se me ha quedado la tarjeta que abre todas las puertas de la oficina y me prestan una provisional, pero la idea de que se me quede mi teléfono donde me pueden localizar con la rapidez que requiere un programa en vivo y donde tengo los datos de un gentío, me produce un sobresalto increíble. Ni hablar de la sensación de que se me vuelva a caer en el baño.

Lo peor, lo que más me asusta es darme cuenta que he pasado a ser esclava de un adminículo. El otro día leía una entrevista que le hicieron a Antonio Banderas donde él contaba que no tenía celular. Entonces me puse a pensar que debe ser divino darse el lujo de no tener uno, que el mundo espere por ti. Sin embargo, mientras sea yo quien espera por el mundo, me la paso con el susto de que se me pierda o se me quede en algún lado.

Por cierto, esto está buenísimo: los diez mandamientos del teléfono celular. Esta en inglés pero está bueno.

http://www.infoworld.com/articles/op/xml/00/05/26/000526opwireless.html

Answer The Call

Yo siempre he tenido tendencia conservacionista. Desde pequeña en mi casa me enseñaron a ahorrar electricidad. Recuerdo a mi mamá detrás de nosotras: ¡Apaguen las luces que esta no es la casa de los Wollmer! (que eran los dueños de la compañía de electricidad). Mi abuelo Pelón, padre de mi padre, era un típo adelantado a su época. Cuando éramos pequeñas, nos hablaba de todos estos temas que hoy están en boga. Nos hablaba de la importancia de estar en armonía con la naturaleza, de no desperdiciar el agua, de respirar adecuadamente, de hacer tiempo para meditar, en fin, la mayoría de los mensajes que ahora se lanzan en forma de SOS para tratar de rescatar el planeta y hasta nuestra propia salud, formaron parte de mi crianza.

Sin embargo, nunca se deja de aprender. Últimamente he descubierto una serie de tips interesantes que pueden hacer la diferencia y que dependen de cada uno de nosotros. Por eso, cuando escucho la discusión de los más puristas sobre lo inútil y hasta contraproducente que puede ser poner en mano de la gente común y corriente un problema tan grave como es el de recalentamiento global, no puedo más que estar en desacuerdo. Es cierto que no lo podemos resolver solos. Es cierto que los gobiernos tienen la gran responsabilidad y que las empresas deben asumir sus cuotas, pero creo que nosotros también. A fin de cuenta somos miles de millones y si cada uno hace un poquito, suma mucho. Como decía el slogan del concierto: "Answer the call". Hay que responder al llamado urgente de la naturaleza. Cada uno desde el papel que le toca en la sociedad.

Algunos piensan que este mega concierto que se transmitió el 7 del 7 del 07 con las mayores estrellas del espectáculo llevando un mensaje ecológico, es banalizar el problema, pero yo creo en la fuerza de las masas y creo que hay público para todo. Hay gente que se entienden bien con la música y que admira a los artistas de forma tal que lo que ellos digan es verdad. No es sólo cuestión de credibilidad sino también de esa especie de conexión mágica que se dan en momentos como esos. Yo creo que ningún conocimiento sobra y los métodos educativos deben ser variados.

¿Que se trata de una ocasión para llevar un mensaje político? Quizás, pero también creo que es hora que dejemos de tenerle asco a la política y comencemos a entender que es allí donde se toman las grandes decisiones que nos afectan a todos. Así que escuchar lo que dicen los políticos y hacer que nos escuchen, apoyar a quien esté de acuerdo con lo que creemos importantes y exigirles que cumplan sus promesas, debería ser un ejercicio natural.

Al menos yo tuve la oportunidad de disfrutar de la música, de enterarme de hechos sobre el recalentamiento global que desconocía y de aprender un poco más. De paso, ya empecé a actualizar mi lista de prácticas personales. Yo sí creo e invito a todos a que respondan al llamado.

Visita el sitio:
http://liveearth.org

sábado, julio 07, 2007

Perrita consentida

Phoebe, esa perrita labradora trucha, es la reina de la casa. Gaby se la encontró en la calle cuando tenía menos de un mes de nacida. La tenía un tipo en la calle dándole cerveza y cuando ella le armó un rollo porque la iba a matar, el tipo se la vendió por 20$.

Ella es súper malcriada. Le ladra a cuanto bicho viviente osa atravesar su territorio compuesto por la casa y el vecindario completo, y no podemos pasarle por un lado sin hacerle cariño en la barriga así sea con los pies porque simplemente nos atrapa con sus patas y nos bloquea el paso hasta que cumplamos el ritual.

Todas las noches se mete en mi cuarto a dormir un rato antes de irse a su trono y en la mañana se aparece a despertarme para que la lleve abajo y le abra la puerta del jardín para ladrarle a Coco, el perrito vecino. Se ofende si le cierro la puerta y cada vez que nos sentamos a comer, ella come también.

A pesar de que es un fastidio calarse los ladridos cada vez que llega alguien a la casa o pasa algún animal cerca de ella, yo no la llevo a entrenamiento ni clases de socialización, ni nada de eso. Al contrario, la llamamos la guardiana o la "wachimana" y la consiento cada vez más. ¿Por qué? Porque si yo dejara que ella se acostumbrara a convivir con otros perros y le quitara su título de reina absoluta del hogar, esta casa estuviera llena de chuchos. Pues si, Pocho y Gaby se la pasan leyendo las páginas de los periódicos donde aparecen las fotos de canes sin amo que ofrecen en adopción. De esos que están en los refugios por un tiempo determinado, pero si nadie los adopta, los sacrifican. Le hacen seguimiento a los casos y hasta llaman a ver si tienen ya aplicaciones de adopción. No critico la sensibilidad que tienen, para nada. Me encanta saber que se preocupan, pero caramba, yo no puedo criar a cuanto animal dejan botado por ahí. No vivimos en una granja. Capítulo aparte merece el tema de los niños huérfanos, como si fueramos la famila Pitt Jolie.

Yo me solidarizo con el sentimiento, pero tengo que poner límites y nada me ha resultado mejor que recordarles que la pobre Phoebe sufriría muchísimo y le haría la vida misarable al nuevo residente.

Por eso, hasta me hago la loca cuando me entero de que aprovecharon mi ausencia para dejarla entrar al único territorio que le tengo terminante prohibido: mi cama. Y todavía tiene el tupé de dejar evidencias.

domingo, julio 01, 2007

Carlos Puchi cumplio los 30

La Banda

Anoche Carlos Puchi, uno de los bajistas y directores musicales más conocidos de Venezuela cumplió treinta años... pero de carrera artística! Pues si 30 años que no son caldo de ñame. Así que prepararon un rumbón para celebrar en Brasseros al que invitaron a todo el mundo. Entre las organizadoras estaban Betsabé Capriles y Millie Abreu.

Bestabé, Alicia, Eli y yo

Prepararon un show en el que partició una cantidad de gente impresionante. Además entre uno y otro artista invitado colocaban clips de su carrera. De Daiquirí, Adrenalina Caribe, Guaco, Franco De Vita, entre muchos otros. El local estaba, lo que se llama hasta los tequeteques. Tanto que una de las organizadoras me llamó varias veces en menos de media hora para asegurarse de que iba porque estaban necesitando nuestra mesay después que le dije que dispusiera de ella y llegué, me arrepentí, porqe no había ni donde estar parado. Por suerte, Betsabé y Dinorah nos consiguieron otra mesa.

Con Eli, Carlos y Dinorah.

Entre los que se presentaron estuvieron Ilan Chester, Alberto Slezynger, Raúl González, Fernando y Juan Carlos, Divine, Alicia Plaza, Karina, Vinicio Ludovic y otros más. Además Raúl fue el presentador de la noche y demostró porque se ha ganado su puesto en este medio tan difícil.

Con Betsabé y Moira.

Conocidos... muchísimos: Valentina Párraga, Moira Angulo, Leonardo Aranguibel, Orlando Urdaneta, Eduardo Pardo, Gabriela Spanic, Gabriela Vergara, Carinés Moncada, Soraya Alcalá, Oswaldo Muñoz, Keyla Ermecheo, Abelardo Tahán, Iván Velásquez, Mercy Mayorca, Negui Capriles, Oscar Haza, Yolanda Medina, Yelena Grillet, etc. etc. Había tanta gente que casi no nos dejan entrar y desde la ventana vi cantidades de personas que esperaron y esperaron hasta que no les quedó más remedio que irse.

Gerardo y Gaby Spanic.

Teníamos años que no pasábamos una de estas veladas tipo noches caraqueñas con amigos, música y mucha risa. A pesar de que casi no se podía uno ni mover, nos las arreglamos para echar un piecito entre las mesas. Nosotros nos fuimos como a las 3 de la mañana, pero todavía quedaba gente adentro para otra fiesta más.

Pocho, Divine y Gerardo.

Esta mañana nos levantamos riendonos y recordando pedazos de la noche. Como la presentación de Divine, que como siempre se la comió. No paramos de reir cuando, con toda la seriedad del mundo, contó al público que una de las cosas más significativas en su vida ha sido ser él. Y después de unos cuantos auto halagos terminó con que además, es bello. Definitivamente Jesús Enrique es un showman con una personalidad difícil de imitar.