domingo, julio 30, 2006

El que mucho se despide

Dicen que el que mucho se despide, pocas ganas tiene de irse. Esa debe ser la razón por la que hemos pasado por una especie de maratón, o lo que en criollo llamaríamos, despedida de borracho. A pesar de las diferencias de edad, procedencia, carácter e historia; hemos disfrutado mucho de la compañía de cada uno y el no vernos más a diario deja como un huequito en el alma que sólo nos queda llenarlo de recuerdos.

El último día empezó en Telemundo donde nos dieron un tour por los diferentes estudios y áreas de producción y post producción. La idea era compartir con los diferentes equipos que tiene que manejar los libretos y cómo se traducen para ellos las indicaciones que se hacen.

A pesar de que para mi y para varios del grupo, la producción no es algo nuevo, sigue siendo interesante desglosar el proceso, especialmente porque cada producción es única, cada equipo es único y es la primera vez que me visualizo del otro lado de barrera.


Después nos fuimos a almorzar. Se suponía que debíamos ir en caravana, pero realmente aquello parecía un rally, "The Amazing Race", latino. Todos persiguiendo a Susana. Lo mejor es que a nadie se le ocurrió llevar la dirección del restaurant o siquiera el nombre, pero al final, llegamos.

El sitio se llama Bucca di Beppo y es un lugar de lo más original. Absolutamente Kitsch, tiene alrededor de 3,500 fotos por supuesto de italianos, cualquier cantidad de estatuas, entre miles de detalles. Los anfitriones nos dieron un tour por la cocina y nos contaron un poco sobre la historia de este ¨sótano".

Un grupo de lo más rico compuesto por profesores, estudiantes, estudiantes del año pasado que se han integrado al grupo y hasta el vice presidente ejecutivo de programación del canal; compartimos el "Último Almuerzo" condimentado de chistes, anécdotas, revelaciones y demás yerbas aromáticas.

Luego, el petit comité se vino a mi casa. No porque fuera un grupo excluyente, sino porque era el de los más resistentes (y ociosos). Para entonces, algunos ya habíamos tomado alguito y otros de repente como que nos alcanzaron y casi se caen en la piscina. Cuento el pecado pero no el pecador, para que después no diga.

Anoche continuamos con la rumba. Nos juntamos en casa de Rosa y Montse para despedir el anexo donde vivieron durante este tiempo.





Entre juegos, bailes (por cortesía de Adriano) y la sangría (cortesía de Rosa), pasamos bárbaro.
Dicen que al final terminaron hasta repartiendo los cachachás de la casa.





Ahora nos toca fajarnos a terminar los portafolios para entregarlos a tiempo y lo mejor posible y esperar con ansias los resultados de las evaluaciones, pero con una arruguita inevitable en el corazón, porque sabemos que ya no nos veremos todos otra vez. De todas maneras, fue un gran placer.

martes, julio 25, 2006

Cerrando ciclos

Estamos llegando al final del taller de escritores y ya se siente en el ambiente. Después de dos meses de clases, nos habíamos acostumbrado a compartir. Ahora sólo nos quedan dos semanas de trabajo individual para presentar nuestros portafolios y luego, esperar. Una espera de dos semanas más que pareceran eternas, para saber si seguimos o no a la siguiente etapa. Hasta ahora hemos bromeado con la idea de la eliminatoria, los elegidos, los del patíbulo, pero a mientras más cerca estamos de la fecha, la risa se va convirtiendo en ansiedad.

No voy a negar que me encantaría seguir adelante porque le he tomado el gusto a esto de escribir ficción, pero también he decidido hacer una lista de las cosas que he aprendido y que por si solas ya valen la pena. Por ejemplo, me he quitado ciertos prejuicios sobre escribir por encargo y más bien, ahora lo veo como un reto. He aprendido a trabajar con técnica, he desarrollado mis propios métodos, incluyendo el que voy a utilizar para dedicarme a mis dos proyectos a partir de mañana y eso ya me hace feliz. Además, ahora respeto mucho más el oficio de escritor de telenovela. He conocido gente interesantísima, me he reído mucho... He aprendido herramientas de trabajo y he aprendido sobre mis propias capacidades. En fin, hasta aquí ha valido la pena. Por el resto, amanecerá y veremos.

El melenudo vino de visita


Este domingo vino a visitarnos Carlos Antonio, el melenudo. Vino acompañado de sus padres, lógico, porque apenas tiene un mes. Pasamos la tarde en la "Adoración del Niño" y no es para menos, pues cada vez que abre los ojitos y te lanza una de esas miradas a través de su pollina larga, uno se derrite.


sábado, julio 22, 2006

Y se echaron al agua

Giancarlo y Maritza se echaron al agua. Hace poco nos sorprendieron con la noticia. Parece que siguieron el consejo ese que dice: No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. Así que los amigos nos pusimos tacuche y los acompañamos a celebrar ese día de felicidad.



Yo me había llevado la cámara para tomar algunas fotos con los amigos, pero en vista de que el fotógrafo parecía que había comenzado la fiesta antes que nosotros, tomé un poco más. No está mal tener un respaldo... por si acaso.

En medio de la fiesta, las hijas de Giancarlo y sus amigas ofrecieron un show con fondo musical de RBD con humo y todo




Aquí tiene para que se entretengan






domingo, julio 16, 2006

Retroceso a la adolescencia

El viernes me reuní con un grupo de compañeros del taller para hacer un poco de vida social, porque no se puede vivir de puras tareas. Nos encontramos en uno de los sitios clásicos de South Beach, Segafredo. Yo pensé que iba a ir más gente, pero los que fuimos nos divertimos bastante, especialmente porque a estas alturas de la vida, el tema principal fue quienes eran los consentidos del salón, las apuestas de quienes clasifican para la siguiente ronda y la clásica de los profesores y sus evaluaciones. Claro que hicimos el intento de hablar de cosas serias como corresponde a los adultos, pero era demasiado divertido el regreso a la adolescencia.

A mi se me quedó mi cámara, pero habían varias en la mesa y pedí que me las mandaran. Sin embargo, el único que me ha cumplido, tres días después, es Héctor, el consentido. Fueron tomadas con su celular, así que las de la noche no son de las mejores. Tampoco hay ninguna buena donde salga Ana María. Pero se le agradece.




Este es el dúo de Héctor que es argentino y Diego, colombiano. Un par de temer. El man y el pibe tienen un sentido del humor bien negro.





Este trío son los representantes de nuestra hemana República de Colombia: Elsa, Diego y Kim
















Rosa de España y Mercedes de México











Aquí aparezco con Max, otro argentino y Montse, mejor conocida como la española que vive en Suiza.
















Luego salimos a caminar como turistas por toda Lincoln Road, llegamos hasta la playa, nos quedamos un rato viendo la luna llena y nos regresamos.

Esa es una de las tonterías que me fascinan de Miami. Una simple caminata hasta la playa en la noche.



El domingo fuimos a ver A 2,50 la Cuba Libre. Esa obra la vi hace como 20 años en Venezuela pero Betsabé me recomendó este montaje. mientras buscaba los datos para ir me encontré con la sorpresa de que la dirigía nuestro porfesor, Roberto Stopello. Tan bello, nos consiguió un descuento del 50% y nos lanzamos para allá. Es una obra super complicada porque se desarrolla dentro de un bar sin separación entre el público y los actores y es dificilísimo no perder la concentración, especialmente cuando el público puede participar o se topa uno con ridículos como el borracho que estaba a la entrada hablando a todo volúmen con la mujer sin respetar el trabajo de las actrices y el interés de los demás. De todas maneras fue otra velada divina.

Al final recordé que esta vez si había llevado mi cámara y nos tomamos una foto en la entrada del bar. La idea era posar como la "chicas" del cartel con Héctor en el medio como nuestro "pimp" pero el fotógrafo creo que pasó más tiempo peleando con el sol que enfocando la vaina como es. Pero en fin, ahí está

lunes, julio 10, 2006

Loriel expuesto

Siempre me la echo hablando de mis hijas, pero hoy le toca a Loriel Beltrán, el novio de Gaby que está exponiendo su trabajo en la Galería de Fredric Snitzer aquí en Miami. Y como era de esperarse, el sábado pasado fue la familia completa a acompañarlo en su opennig.


No es por nada, pero era el mejor de todos. Lo mejor es que la misma noche, vendió dos de los trabajos. Ya Pocho le puso el ojo a dos de los cuadros, pero a precios de galería... ja,ja.




Mis hijitas hermosas

Uno de los cuadros que nos gustó

miércoles, julio 05, 2006

Independence Day

Este es uno de los días favoritos en este país. Entre parrilleras, conciertos y fuegos artificiales, la mayoría de los americanos celebran la independencia de su país y la llegada del verano.








Yo este año no hice mucho porque me tocó limpieza del local y mucha tarea del taller de escritores. Pero en la noche, Pocho y yo nos encontramos con Luis, Mavel y los chamos en el parque para ver los juegos pirotécnicos.


Después de muchas peripecias, logramos algunas fotos.